La piratería es uno de los temas más delicados en la red Internet. Muchos usuarios y empresas sufrieron en algún momento demandas por haber compartido contenidos, como canciones, mediante la red. Ahora Google está haciendo todo lo posible para evitar ser acusada de facilitar la piratería. Eso incluye realizar ciertos ajustes en su buscador para impedir que los internautas encuentren determinadas páginas que podrían infringir los derechos de propiedad intelectual. Durante este año 2012, la compañía ha retirado 51,4 millones de enlaces a páginas web de los resultados de las búsquedas. Google actúa previa solicitud de los titulares de los derechos de autor, o de sus representantes. En la actualidad, la compañía está procesando medio millón de enlaces al día. La semana pasada recibía 3,5 millones de solicitudes de retirada de enlaces por cuestiones de copyright, quince veces más que en enero de este mismo año.
La RIAA, que asocia a las grandes discográficas estadounidenses, es el solicitante más activo con 7,8 millones de enlaces a páginas web sobre los que afirma que infringen sus derechos de propiedad intelectual. El problema es que con tal avalancha de peticiones no existen garantías de que se estén eliminando enlaces a contenidos legítimos. Recientemente, el director legal de Google expresaba su preocupación por los daños colaterales de la legislación de copyright y por el impacto sobre el flujo de la información en Internet. A Google no le queda más remedio que atender esas solicitudes de retirada; en caso contrario se arriesga a ser encausada como infractor de los derechos de autor.
Es lo que establece la Digital Millennium Copyright Act (DMCA), la ley de copyright estadounidense, para los facilitadores de la piratería, entendidos como aquellos que ponen los medios para evitar las protecciones anti-copia. Google pretende continuar sus actividades evitando responsabilidades legales y acogerse a la cláusula de salvaguardia recogida en la ley, pero para ello debe colaborar con los titulares de derechos de propiedad intelectual, lo que incluye eliminar enlaces problemáticos de los resultados del buscador.
No es la única medida que Google ha tomado en este sentido. El pasado mes de agosto de 2012, la compañía anunciaba que iba a penalizar los sitios web sospechosos de piratería en los resultados de las búsquedas. Para ello, dentro del algoritmo del buscador, incluía un nuevo criterio de clasificación: el número de avisos de retirada de contenidos por infracción de copyright válidos que Google haya recibido respecto a ese sitio web. De esa forma, páginas como las de The Pirate Bay o FilesTube quedarían relegadas en las búsquedas.
Anteriormente, en enero de 2011, Google también accedía a eliminar diversos términos relacionados con la piratería de las funciones de autocompletar y Google Instant. En autocompletar, el buscador ofrece sugerencias según el usuario va escribiendo la palabra que desea localizar. Con Google Instant se acelera la muestra de resultados.
No hay comentarios:
Publicar un comentario