Si bien es cierto que existen varios convenios entre las empresas que tiene material en Internet estos no cubren en la totalidad de difusión de distintos materiales, como vemos con el actual veto de la Universal sobre el vídeo Megaupload Mega Song en YouTube. Tras el derribo del videoclip por segunda vez en el portal de videos. Megaupload Inicio un pleito ante un tribunal norteamericano. Los abogados de la Universal se han visto obligados a declarar, y sus explicaciones nos han dejado entrever uno de los aspectos más oscuros de la industria del entretenimiento en Internet.
Cuando el juez les preguntó a los abogados por la infracción de copyright que había motivado la retirada del video musical, éstos dijeron que en realidad no se trataba de una violación de copyright. Que tampoco era porque hubieran utilizado artistas vinculados a la casa como se había dicho en un primer momento. El veto se deriva de un acuerdo privado y secreto que vincula a Google y a la Universal. Mediante este contrato confidencial, la Universal tiene poder de vetar y eliminar del portal de video cualquier contenido que no le guste, sin tener que atenerse a las leyes de ningún país.
La sorpresa va mucho más allá. Cuando el juez les ha exigido que muestren el contrato con las cláusulas que habían citado, se han amparado en que se trata de un acuerdo privado y confidencial, y que en consecuencia no tiene ninguna obligación de mostrárselo a los jueces. La guerra sucia que han iniciado los del lobby del copyright estadounidense contra Megaupload vive así un capítulo más. Antes del juicio, filtraron que uno de los artistas, Will.I.am, no había dado su permiso para salir en el vídeo.
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