Adolescentes y redes sociales

Ciberbullying, acoso por internet y otras figuras que involucran a adolescentes y el mal uso de las redes sociales, son casi el pan de cada día. Por ello, cualquier medida de seguridad para protegerlos es poco.

No dejes de ser tú. "No permita que nadie presione a su hijo adolescente para que sea alguien que no sea. Hágales conocer sus limitaciones; aunque se crea un experto en el uso de la red", explicó Cinthia Gonzáles, psicóloga.

¿Buena persona online? Para Rodrigo Carvajal, psicoanalista, los buenos modales que se inculcan desde el hogar se deben reflejar en cualquier espacio y situación, incluso en las redes sociales. "Enséñele a utilizar las herramientas de privacidad para bloquear a las personas ofensivas".

Pensar antes de escribir. Aunque ahora es muy común ver que los jóvenes usen Facebook o Twitter como diarios en los que se escribe cada suceso que pasa en sus vidas; "sería bueno recomendarles que se trata de un espacio abierto y la red pone a disposición información que puede ser usada en su contra", apuntó Ronald Melgar, ingeniero informático.

Ojo con las fotos. "Compartir fotos provocativas o detalles íntimos online, aunque sea en un mensaje de correo electrónico privado, puede traer problemas más adelante. Personas que ahora considera amigos podrían usar esta información en contra, si dejaran de serlo", destacó Carvajal. Incluso con las opciones de privacidad activadas, la gente de tu lista de amigos puede copiar y pegar en otro sitio el contenido que publiques.

Contraseña privada. Gonzáles, Carvajal y Melgar coincidieron al sugerir que uno de los peligros a los que se exponen los adolescentes, es dando a conocer sus contraseñas. "La privacidad es algo que se debe cuidar y respetar".

Regla de oro. A decir del experto en informática y el psicoanalista remarcaron que una de las reglas de oro de cualquier niño o adolescente es no hablar con ningún extraño; "no frente a frente y menos a través de una red social", aseguraron.

No a las citas. Una cita a ciegas puede ser emocionante, "pero los riesgos son muchos, comparados con los supuestos beneficios que podrían acarrear. La sorpresa es un factor que puede como no, resultar favorable", aconsejó el experto informático.