La pornografía es una industria rentable; de hecho, mueve unos 97.000 millones de dólares al año, según un informe del diario español ABC. Por ello, desde que aparecieron las Google Glass, las personas que se dedican al negocio del sexo no quieren perderse ninguna oportunidad de utilizar sus contenidos.
Aunque las cláusulas registradas por el gigante de internet son claras y tratan de evitar a toda costa que el sexo inunde este dispositivo de realidad aumentado, lo cierto es que los usuarios se dan modos para grabar sus aventuras sexuales para fines privados y, también para subirlas a la red.
En este sentido, Sex with Glass anima a utilizar dos Google Glass para ciertos encuentros íntimos.
El funcionamiento de esta aplicación consiste en sincronizar el dispositivo generando así un punto de vista distinto.
"El sexo nunca será igual. Vea todo, desde todos los ángulos”, escribe en su página esta empresa fundada por el tecnólogo y desarrollador Sherif Maktabi.
Utilizando los comandos de voz, Glass transmitirá lo que la otra persona está viendo.
Se grabará un video, en el que se puede editar de forma fácil introduciendo por ejemplo música, y enviarlo a un servicio de almacenamiento en la nube.
En caso contrario, las imágenes se eliminarán de forma automática "para siempre” en un plazo de cinco horas.
Una aplicación diferente
Este gadget, llamado a revolucionar el mercado cuando vea la luz presumiblemente este año, dispone de su propia tienda de aplicaciones al margen de la muy conocida Google Play.
Ahí no entran las aplicaciones consideradas de dudosa ética por parte de la compañía.
Hace unos meses, Google retiró la aplicación Tits&Glass, que permitía a los usuarios del dispositivo recrearse en imágenes sexuales. El servicio fue creado por la compañía surcoreana para adultos Mikandi.
Pero esta industria insiste.
Lee Roy Myers, de WoodRocket.com, explicaba a la revista especializada Business Insider que "si la calidad es alta y el material de archivo no es demasiado grande, Google Glass ofrecerá a los espectadores una experiencia completamente nueva sobre la visión del porno. Podremos conseguir planos que nunca se pudo antes debido a la colocación y el tamaño de la cámara. ¿Es el futuro del porno? No sé. Pero me siento muy emocionado de probarlo y ver”, sostiene Roy Myers, quien defiende el derecho de las personas a registrar en un video su intimidad.
Desde la otra acera, el periodista Saul Mimbaum criticó el uso de Google Glass para fines eróticos o pornográficos.
"Es la distorsión de un principio elemental, sobre todo si se negocia con las imágenes obtenidas gracias a esta aplicación”.
Google hoy
Furor Las gafas inteligentes de Google son uno de los productos que más llamaron la atención en el Salón de la Electrónica de Consumo (CES), pero la competencia empieza a aflorar.
Prototipos Los prototipos del gigante de internet siguen siendo utilizados por pocos ingenieros que desarrollan aplicaciones y "exploradores” que pagaron 1.500 millones de dólares por ellos.
Ventajas Por ejemplo, si está en Japón y no habla ni lee japonés, las gafas pueden traducir las letras para usted y ayudarle en sus desplazamientos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario