Aún con la última polémica todavía presente, Google se las ingenia para ampliar el campo de uso de Google Glass, sus lentes de realidad aumentada. Esto, porque a las conocidas funciones de audio, video, fotografía y acceso a Internet, se suma la interacción con aparatos caseros, como refrigeradores o la puerta del garaje.
Concretamente, Google solicitó una patente en la que se especifica cómo el gadget podría ayudar a controlar algunos electrodomésticos mediante conexión Wi-Fi o Bluetooth.
De esta forma, sería posible encender o apagar aparatos, comprobar si el café en la cafetera está caliente aún, ver cómo está el asado en el horno, o saber qué hay en el refrigerador sin abrir la puerta, entre otros. Sin embargo, ya aparecen voces disidentes con este tipo de tecnología, ya que si un hacker logra ingresar al sistema, teóricamente podría tener el control de todo un hogar.
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